Un total de 36.300 visitantes y 286 stands repartidos en un espacio de 13.500 metros cuadrados son los datos finales de una edición de la feria de la caza Cinegética de la que los organizadores destacaron la amplia presencia infantil, algo que ven como toda una garantía de relevo generacional para el sector y para todo lo que lo rodea.
La que fue la undécima edición de Cinegética, que se desarrolló del 20 al 23 de marzo en el madrileño recinto de Ifema, superó en 3.500 visitantes a la que la precedió y contó con un amplio programa de actividades en el que no faltaron los grandes clásicos de esta cita, como son las exposiciones de taxidermia, los stands de las principales marcas de armas y ropa de caza, las demostraciones de cetrería y los desfiles de rehalas.
Ya presente en las anteriores ediciones, pero cada vez con un protagonismo mayor, cabe destacar el componente gastronómico de este evento y es que eventos como el concurso de tapas que organiza la feria en colaboración con el IES Hotel Escuela de la Comunidad de Madrid y SCI Iberian Chapter despertaron el interés de buena parte de los amantes de la caza que pasaron por Ifema.
«La habilidad y profesionalidad de los jóvenes finalistas, bajo la supervisión de chefs profesionales, se ha demostrado con tapas de calidad insuperable, poniendo en valor la carne de caza, que, tras la valoración del jurado, fueron degustadas por todos los asistentes», explican desde la organización acerca de este certamen gastronómico.
Mención especial merecen las exposiciones de taxidermia, con las que los maestros de esta disciplina tan peculiar parecen devolver a la vita a animales muertos y recrean escenas similares a las que se producen en la naturaleza más salvaje. Un jabalí que sufre el ataque de unos lobos, un leopardo con un pequeño antílope entre su fauces y muchas otras composiciones sorprendieron a los visitantes de Cinegética.
Demostraciones de tiro y protagonismo canino
En el apartado lúdico, desde Cinegética destacan el éxito de las demostraciones de tiro sobre siluetas de animales, con la participación de verdaderos ases de esa habilidad y también con la de muchos visitantes que probaron suerte con carabinas de aire comprimido o con el arco.
No podían faltar en una feria como Cinegética los perros, compañeros inseparables de los cazadores que recorrieron los pasillos de Ifema como unos visitantes más. «Las rehalas desfilaron por los pasillos al toque de caracola haciendo las delicias de los monteros y, sobre todo, del público infantil», exponen los organizadores en el comunicado en el que hacen balance de la feria.