La decisión del Ministerio de Cultura de eliminar el Premio Nacional de Tauromaquia trajo consigo la inmediata reacción de la Fundación del Toro de Lidia, que anunció que se encargaría de conceder el galardón correspondiente a este año y que ha encontrado el firme apoyo de comunidades autónomas como las de Madrid, Castilla-La Mancha y Comunidad Valenciana, todas ellas dispuestas, no sólo a ayudar a la mencionada fundación, sino incluso a organizar sus propios premios taurinos.
El Gobierno de la Comunidad de Madrid y su presidenta, Isabel Díaz Ayuso, siempre se han mostrado como firmes defensores de la tauromaquia y lo han hecho, no sólo con palabras, sino también con hechos. Como reacción a la supresión de los premios por parte del Ministerio de Cultura y de la respuesta de la Fundación del Toro de Lidia, el consejero de Medio Ambiente, Agricultura y Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, Carlos Novillo, ofreció el edificio de la Real Casa de Correos, sede del Gobierno de la Comunidad de Madrid, para acoger la entrega de los galardones alternativos.
«La Comunidad de Madrid apoyará esta iniciativa ofreciendo la Real Casa de Correos para acogerlos hasta su recuperación por un nuevo Gobierno en España. Animamos al resto de comunidades autónomas a sumarse y defender nuestro patrimonio cultural», anunció Novillo.
La presidenta de la Comunidad de Madrid siempre se declaró una gran aficionada de los toros y es habitual verla en la plaza de Las Ventas, donde Ayuso recibió el cariño de los aficionados y de toreros como El Juli, que en su despedida del coso madrileño le brindó uno de los astados a los que dio muerte y le dijo: «Gracias por todo lo que haces por la tauromaquia, por España y por Madrid».
Las ayudas económicas al sector taurino, la organización y financiación de corridas de toros y otros espectáculos o la recuperación de las retransmisiones de la Feria de San Isidro en Telemadrid son sólo algunos ejemplos de cómo se concreta ese aprecio por la fiesta nacional de Ayuso y, por extensión, del Gobierno autonómico que dirige.
Otras comunidades se suman a la iniciativa
La Fundación del Toro de Lidia y la Comunidad de Madrid no estarán solas con su propuesta para mantener vivo el Premio Nacional a la Tauromaquia y es que Castilla-La Mancha y la Comunidad Valenciana también se suben al carro tras haber manifestado su enfado por la cancelación unilateral del galardón por el Ministerio de Cultura que encabeza el antitaurino Ernest Urtasun.
«Quiero anunciar que vamos a contactar con el sector taurino para crear desde Castilla-La Mancha unos Premios de Tauromaquia«, declaró el presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page, que abre un nuevo frente con el Gobierno central en manos de su propio partido.
También reaccionó a la supresión del Premio Nacional de Tauromaquia el vicepresidente de la Comunidad Valenciana y torero Vicente Barrera, que expresó su «total repulsa» ante una decisión que considera «arbitraria y sectaria».
«No solo un acto de censura, sino también un ejemplo de sectarismo político al intentar imponer una única perspectiva cultural desde la izquierda«, manifestó Barrera para después añadir que “este es un símbolo de ataque la libertad de expresión, cuando el papel del Estado debería de ser el de la promoción y protección de la diversidad cultural que caracteriza a nuestro país”.