A los aficionados del Deportivo de La Coruña no les ha gustado nada que el presidente de la entidad blanquiazul, Antonio Couceiro, retomara la discusión con el Ayuntamiento por la cesión del estadio de Abanca-Riazor en un momento tan importante como es el final de temporada y mucho menos que lo haga a pocos días de unas elecciones municipales.
Fueron muchos los deportivistas que, a través de las redes sociales, acusaron a Couceiro de utilizar al Deportivo con fines políticos, en concreto, para apoyar al Partido Popular de cara a los próximos comicios municipales. El presidente del Dépor, cuya vinculación con el Partido Popular queda patente en su currículum, acusa al Ayuntamiento de pretender cobrarle al club por el uso del estadio, algo que la alcaldesa Inés Rey, ha desmentido al afirmar que por lo que quiere percibir dinero el Ayuntamiento es por el patrocinio de Abanca que ha añadido el nombre de la entidad bancaria a unas instalaciones que son de titularidad municipal.
En todo caso, lo que indigna a los aficionados no es la falta o carga de razón de cualquiera de las dos partes implicadas, sino el hecho de que el presidente de su club, al que algunos llaman «florero», parezca más preocupado de echarles un capote a sus amigos del PP que del devenir del Deportivo.
«También dice el florero que los socios le preguntan por la calle por el estado del convenio. No se puede ser más mindundi. Claro coño, si es que es lo que preocupa a la afición ahora mismo… Nuevamente utilizando al Dépor con fines políticos a favor del PP de A Coruña», escribió en Twitter Orgullo Coruñés (@Buah_neno), ironizando con lo poco que preocupa a los seguidores del club el tema que Couceiro ha vuelto a poner sobre la mesa.
Mezcla de instituciones
Sacar el tema del convenio del estadio no es la única metedura de pata del presidente Couceiro que ha indignado a la parroquia deportivista y es que al máximo representante institucional del club coruñés no se le ha ocurrido mejor cosa que anunciar una medida tan impopular como la de ratificar su confianza en el entrenador Óscar Cano durante un acto de la Cámara de Comercio, entidad que nada tiene que ver con el Dépor más allá de que su presidente es, adivinen… Antonio Couceiro.
«El Deportivo tiene una dimensión social tan grande que las comunicaciones que afectan a la entidad no se deben hacer deprisa y corriendo, en medio de actos de otras instituciones. Más aún si son asuntos a los que se les quiere dar seriedad y transmitir confianza», comenta el periodista Fran Hermida (@FranHermida1), jefe de Deportes de la emisora Radio Coruña.
Fran Hermida no fue el único periodista que criticó la inoportuna intervención de Couceiro en un acto de la Cámara de Comercio. Otros, como Xose A. Fraga, de la Televisión de Galicia, también le afearon al presidente su falta de acierto.
«Visto que el presidente del Deportivo, habitualmente callado, habla de las cosas del club en la Cámara de Comercio y no delante de la prensa deportiva, no descartemos que la próxima rueda de prensa sobre el comercio la dé en el estadio de Riazor. Todo puede ser», apuntó Xose A. Fraga (@xebelo) en Twitter.