El castillo de San Antón de A Coruña se convertirá el próximo sábado (21 de octubre) en un observatorio astronómico al aire libre, al sumarse este espacio tan icónico de la ciudad gallega a la Noche Internacional de Observación de la Luna que organiza la NASA. Hasta tres telescopios se instalarán para que los ciudadanos puedan disfrutar, siempre y cuando el tiempo lo permita, de un evento único y sorprendente.
La cita, según informa la Agrupación Astronómica ÍO de A Coruña que se encarga de preparar el evento en el castillo de San Antón, se prolongará de 20.00 a 23.00 horas y, para acceder al recinto habilitado para la observación lunar, no será necesaria entrada ni invitación de ningún tipo. Eso sí, la celebración de esta fiesta de la astronomía queda a expensas de la meteorología y los pronósticos para el día fijado, todo hay que decirlo, no son nada halagüeños.
Será el próximo viernes, justo un día antes de la noche de observación de la Luna en el castillo de San Antón, cuando los organizadores confirmarán si los planes siguen adelante o si, por el contrario, todo se cancela ante una previsión de cielos cubiertos y lluvia. Si finalmente se suspende, los apasionados de la astronomía de A Coruña pueden estar tranquilos, pues podrían disfrutar de la actividad el próximo mes de noviembre.
La Noche Internacional de Observación de la Luna es un evento mundial de divulgación pública patrocinado por la misión Lunar Reconnaissance Orbiter (LRO) y otras organizaciones astronómicas de la NASA que fomenta la observación, la apreciación y la comprensión del satélite.
Un castillo con historia y leyenda
Ubicado en un pequeño islote unido a la ciudad por una estrecha lengua de tierra, el castillo de San Antón es uno de los edificios más icónicos de la ciudad de A Coruña y, a lo largo de la historia, tuvo muy diversas funciones, entre ellas la de cárcel y leprosería. En la actualidad alberga un museo arqueológico que hará las delicias de los aficionados a indagar en el pasado.
El castillo de San Antón es también un lugar de misterio. Una de las leyendas más conocidas del edificio es la que dice que en él murió Manuel Blanco Romasanta, conocido popularmente como El Hombre Lobo de Allariz y único caso documentado de licantropía clínica. Sus coetáneos y quienes conocen su historia han querido ver en este personaje la representación real de figuras como El hombre del saco o el Sacamantecas.