La edición del Benidorm Fest del pasado año 2022, además de habernos dejado la polémica elección de Chanel como representante de España en Eurovisión y de haber originado el fenómeno Tanxugueiras, será recordada por la teta de Rigoberta Bandini, muy presente en la canción titulada Mamá con la que concurrió la artista al certamen y, posteriormente, convertida en disfraz de éxito para el Carnaval, una moda esta última que continúa este año.
Lo cierto es que disfraz de teta es original y sencillo al mismo tiempo y tiene ese componente transgresor y reivindicativo que tanto gusta a algunos en estas fechas del Carnaval, en las que es posible pasarlo bien con los amigos y enviar un mensaje social al mismo tiempo. Esto debieron pensar los integrantes de una pandilla de amigos de A Coruña que decidieron hacer del disfraz de teta su uniforme carnavalesco y que lo hicieron añadiendo al traje que reproduce la forma de la susodicha parte de la anatomía femenina, una capa de superhéroe y un antifaz.
El disfraz de teta es original y sencillo al mismo tiempo y tiene ese componente transgresor y reivindicativo que tanto gusta a algunos en estas fechas del Carnaval
«No somos unas tetas, somos las supertetas», comentaba uno de los miembros de esta particular grupo que llamó la atención de propios y extraños tanto por el número de componentes perfectamente uniformados con los que contaba, alrededor de una docena, como por lo transgresor del atuendo.
Adaptarse a las modas
Las empresas que se dedican a la creación de disfraces invierten gran parte de su tiempo en tratar de adelantarse a lo que sus clientes van a pedir y, obviamente, esa tarea les exige estar muy pendientes de las series de televisión más vistas, de las canciones más escuchadas, de las noticias más comentadas y, sobre todo y ya desde hace unos años, de las publicaciones que aparecen en redes sociales y que pasan a formar parte de la categoría de aquellas que se califican como virales.
La empresa gallega Don Disfraz ya había analizado el pasado año el caso del curioso disfraz de teta. Al parecer, que un atuendo triunfe en Halloween o en Carnaval depende, por un lado, de que exista una demanda latente y, por otro, de que las empresas sepan detectar esa demanda y sacar al mercado un producto que la satisfaga con la suficiente antelación.
“Tras el éxito de la canción de Rigoberta Bandini y de las numerosas campañas contra la censura de pechos en Instagram, pensamos que la teta merecía tener su propio disfraz para Carnaval, así que nos pusimos manos a la obra y diseñamos ese producto”, explicaba entonces Roberto Domínguez, gerente de esta empresa ubicada en Ponteareas (Pontevedra).