Las imágenes de caza que aparecen en las redes sociales siempre generan controversia y si hay una persona en el mundo que se ha convertido en blanco de las críticas de los animalistas por mostrar sin complejos su pasión por la actividad cinegética esa es la checa Michaela Fialova que, además de cazadora, es una campeona de tiro deportivo y una apasionada de las armas de fuego.
Ciervos, zorros, lobos, jabalíes, osos y otros animales más exóticos, como leones, jirafas y monos han aparecido, ya sin vida, en las fotografías publicadas en las redes sociales por Michaela Fialova, a la que muchos han bautizado como «la cazadora sexy» y que posa junto a sus piezas con una sonrisa de satisfacción en la cara que despierta la ira de los animalistas más militantes, que la insultan y que incluso han llegado a desearle la muerte.
Sus detractores llegaron a organizar una petición digital de firmas a través de la plataforma Change.org para vetar a la joven cazadora en las redes sociales y se le impidiera así seguir compartiendo un contenido que ellos consideran violento e inapropiado.
Pese a esas críticas, es indiscutible el éxito de Fialova en las redes sociales, como muestra el hecho de que su perfil en la red social Instagram cuente con más de 44.000 seguidores o el de los muchos comentarios de aprobación que recibe en su página de Facebook (Michaelka’s hunting) cada vez que publica una fotografía de sus cacerías por el mundo.
Casi tanto como las imágenes, aunque estas sean lo más llamativo y lo primero que se percibe, sorprenden los comentarios, con los que la cazadora demuestra tener una fuerte personalidad y, como se suele decir, pasar ampliamente de lo que los animalistas puedan decir de ella.
«He oído que Eslovaquia tiene un problema con los osos… Bueno, yo tendría la solución», escribió Fialova como comentario a una imagen en la que aparece agarrando a un oso al que acaba de dar muerte que, todo hay que decirlo, sí generó numerosas muestras de aprobación entre los cazadores, que resaltaron la pericia de la checa y la calidad de la pieza abatida.
Aunque el mero hecho de cazar le apasiona, Michaela Fialova, como hacen otros cazadores, aprovecha su repercusión en las redes sociales para mostrar lo que aporta al medio ambiente y a la sociedad la actividad cinegética. Así, acompaña su foto con una cebra abatida de un comentario en el que explica que se comerá su sabrosa carne o destaca, al mostrar una imagen suya con un elefante muerto, lo importante que es la caza de este animal para la economía de un país como Botsuana.
Estrella en Onlyfans y apasionada de las armas
Michaela Fialova es mucho más que una cazadora y, en sus propio perfil de Instagram, se define a sí misma como «profesional en nada», contraria a la caza furtiva, «comediante», «aviadora amateur», «loca gilipollas», campeona de kickboxing y «puta de Onlyfans».
Su referencia a Onlyfans, red social famosa por permitir que sus usuarios obtengan dinero de sus seguidores de forma directa y por unos contenidos en los que predominan los vídeos y fotografías de contenido sexual, deriva de su perfil en esa plataforma de suscripción, desde el que comparte contenidos subidos de tono que no suponen más que un extra a las fotografías en las que aparece ligera de ropa publicadas en redes como Instagram.
Michaela Fialova utiliza también el altavoz que le brindan las redes sociales para mostrar su pasión por las armas con las que, además de practicar la caza, participa en entrenamientos y competiciones de tiro y posa en algunas de sus imágenes más provocativas.