La Comunidad de Madrid ha convocado una nueva línea de ayudas para que los ganaderos de la región puedan adoptar medidas preventivas frente a los ataques del lobo y de perros asilvestrados. La compra de collares con GPS, la instalación de vallados perimetrales fijos y móviles y la adquisición y mantenimiento alimenticio de mastines son algunas de las actuaciones que se podrán financiar con estos fondos.
El Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid ha publicado ya el texto que regula las ayudas para prevenir los ataques del lobo y los interesados tienen un mes para solicitarlas, para lo que deben adjuntar las justificaciones de gastos y demás documentación requerida.
«Estas medidas se consolidarán a largo plazo, con el objetivo de apoyar la actividad ganadera en nuestra región», expuso la consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura de la Comunidad de Madrid, Paloma Martín, que recalcó el compromiso del Gobierno que preside Isabel Díaz Ayuso para «evitar y prevenir daños a la cabaña extensiva madrileña, poniendo a disposición del sector agropecuario medidas eficaces que ayuden a proteger su ganado».
Cuantías y destinatarios
El Gobierno regional ha presupuestado un total de 200.000 euros para esta partida pionera, que prioriza aquellas explotaciones que se encuentren en municipios con numerosos ataques de este animal salvaje, que sean de carácter ecológico o que dispongan de razas autóctonas catalogadas en peligro de extinción. La cuantía podrá alcanzar el 100% de los costes subvencionables, con un máximo de 10.000 euros por titular y planta.
Esta convocatoria se enmarca dentro de la Estrategia del Lobo y la Ganadería en la Comunidad de Madrid, que se gestó durante la celebración de la Mesa del Lobo, en julio de 2022. Contó con la participación de los principales actores sociales implicados en la gestión de este cánido y su compatibilización con la ganadería extensiva. Tres meses después, el Consejo de Gobierno aprobó un presupuesto de 150.000 euros para incrementar las indemnizaciones por ataques al ganado